Después de Madrid llegó el cumpleaños de Fon y Balmo -ambos dos responsables de ese milagro que es La Calleja-, con muchas horas de música y un encuentro anodino sobre las tablas: Bueno, González (es el principio de algo, seguiremos informando). Y tras eso, el necesario descanso. Mi voz se rompió un poco y mi brazo izquierdo sufrió una contractura, con lo que escapé a mi centro de gravedad una temporada. Allí me acostumbré a los pequeños placeres domésticos, que diría el maestro: salir a comprar el pan y la prensa, tomar el vino de las 13:00 con los jubilados, escribir canciones, apostar por Costa de Marfil, emborracharse con levedad, fregar los platos... La vida.
La gira continúa, y tras el descanso -del que salieron muchas cosas-, el miércoles pasado tomé un avión a Barcelona para tocar en un lugar mítico: L´Astrolabi. Es uno de esos sitios donde se toca desenchufado y te dan las mil de la madrugada hablando con los dueños. Un lujo, vaya. Vinisteis unos cuantos, más de los que esperaba, y me hicisteis un poco menos dura la resaca del día siguiente. En la mañana del viernes, ataquines Bellvara y este menda sudaron carretera hasta Valencia, a golpe de clásico radiofónico y ventanillas bajadas, para grabar unas teclas y una voz en el brand new disco de Guille Dinnbier. Al acabar... La noche, claro. Y Manolo Tarancón. Y El Vedat. Y la hospitalidad. Y al día siguiente Castellón, donde tocamos al aire libre en "El huerto" (Segorbe) y en el "3 historias"(Altura) y nos quedaron las ganas de quedarnos...
4 comentarios:
Joder que bueno suena todo, me alegro por ti, sólo me jode que en ese reemprender de gira no vaya a poder verte, sigo teniendo la esperanza de que, como ya hizo tu colega Pablo, pases por Andalucía alguna vez. Un abrazo crack!!
Barcelona estuvo muy bien!
Que bien suenas...
Barcelona, estoy pensando en volver antes de terminar el año...
espero que con la música ganes más que con las apuestas deportivas. ¡haz caso a maldini!
un abrazo
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