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viernes, 16 de julio de 2010

Barrio de la paz

Soy de un pueblo de la "cuenca minera" asturiana al que denomino como "mi centro de gravedad", del que muchas veces me habréis oído hablar y que se llama Turón. Apenas somos unos 4000 habitantes -y digo somos porque sigo estando censado allí y paso, más o menos, 1/3 del año por sus bares- y les puedo asegurar que somos gente acostumbrada a resistir. Turón fue uno de los núcleos duros de "Octubre del 34"y de la guerra incivil; y llegó a tener 20.000 habitantes en los tiempos más provechosos de la explotación minera del carbón. En 1995 se cerró el último pozo minero y sufrimos la desindustrialización peor organizada que estos ojos vieran.

Por algún motivo sin explicación -quizás la lucha-, "mi centro de gravedad" es un lugar donde las preguntas no se cierran. Siempre ha habido ganas de pelear, de escribir, de hacer. Si en 1927 Margarita Nelken decía esto: En todos los Ateneos asturianos que conozco observé un grandísimo amor a la cultura, pero los que me llegaron al alma fueron los ateneístas de Gijón y Turón; viendo a estos hombres renace en mí la esperanza de que en breve se podrá formar la nueva España que tanto necesitamos, en 2005 ese mismo ateneo reconvertido en Biblioteca Pública ganaba el Premio Nacional de Fomento de la Lectura por el programa "Bibliotecarios por un día".

Podría enumerar hasta la saciedad a toda la gente pone piedras por la cultura y el movimiento en mi centro, pero hoy he escrito todo esto por la última gran salida a la palestra: Truequedart. Un proyecto liderado por Imanol Núñez que cuenta con el mejor elenco de músicos posible y que acaban de disparar un videoclip con el tema "Barrio de la paz" grabado en Turón, con la gente de allí como protagonista y bajo la dirección de Señor Paraguas, quién sino. Aquí lo tenéis. Yo me emocioné

lunes, 12 de julio de 2010

Republicano

No tengo sentimiento de españolidad. Todas esas banderas rojigüaldas me ponen bastante nervioso y traen a mi cabeza imágenes nada bonitas de un pasado que nunca debió existir -soy historiador, tengo demasiadas fotografías aquí dentro-. Sin embargo, cuando veo una bandera tricolor, con una banda morada, me cambia la cara. No es sentimiento geográfico, es sentimiento político por lo que fue aquella República, por la solidaridad. Anoche vi el partido de "la roja" porque, aún no siendo muy futbolero, esos chicos juegan realmente bien a este deporte y da gusto verlos. Y el caso es que Iniesta, Villa, Casillas... parecen gente humilde, buena. Nunca he tomado un café con ellos pero "me caen bien". Hicieron juego en equipo para un bien común. No premiaron las individualidades. Hicieron dedicatorias emotivas. Repito, no me siento muy español, no soy capaz. Soy ciudadano del mundo, como el otro. No sé que es eso del "orgullo patrio" y ese himno sin letra que todo el mundo tararea me provoca mucha indiferencia. Pero ayer... en fin, qué queréis que os diga, me sentí un poco republicano.

viernes, 9 de julio de 2010

Descansando, dando envidia y otros tópicos veraniegos


Estoy "de vacaciones" -en mi trabajo, siempre entre comillas, ustedes saben-. En fin, que a excepción de algo que puede salir en agosto, no vuelvo a la carretera con mis canciones hasta septiembre. Esas comillas de las que hablamos tienen dentro una buena época para acabar canciones, seleccionar otras, drogar a alguna musa, cazar arreglos, engañar productores... Comenzar a engrasar, en fin, el engranaje del próximo disco. ¿Fecha de salida? Primero tengo financiarlo -en ello estamos-. Yo sólo sé que saldrá algún día porque, aunque sé bastante de tirar toallas, este pequeñuelo verá la luz, cueste lo que cueste.

Después del verano, como digo, volveremos a la carretera. Estamos intentando cerrar fechas por el sur, tenemos cosas en Galicia y volveremos a algún lugar habitual. Entre fines de noviembre y principios de diciembre haremos el "fin de gira" en Oviedo, con banda e invitados, y cerraremos un ciclo.

Por el momento, nada más desde el norte y el calor. Ah bueno, sí, lo de la envidia. El caso es que soy uno de esos pocos afortunados que ya han escuchado lo próximo de Fabián. Y es hermoso. Punto